martes, 24 de marzo de 2009

Bibliotecas y NTIC

Todas las bibliotecas estamos ante un reto que puede convertirse en una amenaza aunque, bien mirado, es una oportunidad. Aclarando, me refiero a las archiconocidas TIC's (Tecnologías de la Información y la Comunicación). Digo que es un reto porque se plantea como algo inevitable. No podemos pensar que nuestra biblioteca está o puede estar al margen de este fenómeno por muy pequeño que sea nuestro municipio. Al final, tendremos que humillar la cerviz y acceder a que nos pongan un OPAC o nos incluyan en una de las redes electrónicas de lectura que hay por las distintas comunidades autónomas o nos coloquen unos PC's para que los abuelitos puedan recibir fotos de los nietos que viven en Londres o puedan darse de alta en Facebook para compartir fotos de cuando la guerra. Como digo, es inevitable.
Pero al mismo tiempo es una amenaza porque puede pillarnos contrapié. Los bibliotecarios y bibliotecarias no podemos estar en formación continua de nuevas tecnologías, entre otras cosas porque tenemos que dedicar nuestro tiempo profesional a otros menesteres. Nuestra relación con estas tecnologías debería ser instrumental. Es decir, deberíamos conocer qué existe pero no cómo funciona. Para eso ya existen otras profesiones. Sin embargo se tiende al do it yourself en el mundo de las bibliotecas. La mayoría de webs de bibliotecas están confeccionadas por bibliotecarios con un manejo rudimentario de código html (entre los que me incluyo), los servicios y productos electrónicos que se ofrecen (alertas documentales, boletines electrónicos, dossieres, difusión de novedades, etc.) o son híbridos entre un sistema electrónico y otro amanuense o no aprovechan todo el potencial de la herramienta porque se quedan en sus recursos básicos...y dando gracias. Y mientras las TIC's corren que vuelan. Además, dentro de la posible amenaza hay que contar con la escasa asistencia técnica de quienes deben estar al corriente del funcionamiento de estas tecnologías. Me refiero a los departamentos de informática y sistemas de cada ayuntamiento (me refiero a los ayuntamientos porque suya es la titularidad del 99% de las bibliotecas públicas). Estos técnicos frecuentemente (habrá honrosas excepciones, no lo dudo) se limitan a cargar configuraciones preestablecidas y a reparar equipos y rara (rarísima) vez ofrecen asistencia en cuanto a la existencia de la tecnología adecuada para una función concreta. Así que la amenaza, como vemos, es doble: nuestra porque con el "yo me lo guiso, yo me lo como" sólo dilatamos el empleo del recurso apropiado y cuando lo hacemos es infrautilizándolo y/o a destiempo; y de los departamentos de sistemas porque no están a la altura (no entro en quién es el culpable) que requieren los departamentos públicos actuales.
Pero, en mi afán de ver el vaso medio lleno yo digo que es una oportunidad que no debemos desperdiciar. Jamás estuvo la biblioteca tan capacitada para llevar a cabo sus funciones. Jamás pudimos ofrecer servicios tan especializados y tan personalizados, es decir, tan adecuados para quienes utilizan la biblioteca. Nunca tuvimos, bibliotecarios y usuarios, oportunidades como las actuales para estar tan cerca unos de otros en cuanto al servicio de información se refiere. No voy a hacer un listado de tecnologías, servicios o productos que utilicen las TIC. A todos se os ocurrirán varios de ellos. Es nuestra oportunidad para hacer presión y que se lleven a cabo.

No hay comentarios: